Un dispositivo que permite ser implantado usa pulsos de luz para estimular los nervios auditivos, mejorando los implantes cocleares existentes.

Los implantes tradicionales, basados en electrodos que actúan directamente en la membrana del oído interno a través de señales eléctricas para estimular los nervios auditivos, pueden llegar a dañar todavía más la audición. 

Sin embargo, una nueva investigación coordinada por el Centro Suizo de Electrónica y Microtecnología en Alpnach (Suiza) ha descubierto recientemente el «efecto optoacústico«: las células pueden ser estimuladas por pulsos de luz infrarroja en vez de señales eléctricas.

Respecto a esta novedad existen varias teorías al respecto, una de ellas afirma que funciona al calentar de forma rápida las células nerviosas, con los pulsos de luz hace que se despolaricen, lo que desencadena un potencial de acción; otra teoría dice que los pulsos láser calientan las moléculas del oído interno causando pequeñas ondas de choque que hacen vibrar los pelos de la misma forma que las ondas de sonido hacen habitualmente.

En el Laser Zentrum Hannover de Alemania se ha encontrado una evidencia con respecto a este último punto de vista: el sistema no funcionaba en conejillos de indias que tenían nervios auditivos intactos pero les faltaban las células ciliadas. Esto confirma la teoría de estimulación optoacústica, favorecedor del desarrollo de una nueva generación de implantes cocleares.

Este trabajo forma parte del proyecto de mejora de sonido Active Implant for Optoacoustic Natural, financiado por la UE.

Más información  en New Scientist.